Madrid, España – A menos de dos meses para su vencimiento, la Ley de Memoria Democrática (LMD), popularmente conocida como la «Ley de Nietos», sigue generando una ola de trámites y una alta demanda en los consulados españoles alrededor del mundo. Con el plazo para presentar las solicitudes fijado para el 22 de octubre de 2025, los consulados han intensificado sus esfuerzos para gestionar la avalancha de peticiones.
Una prórroga que llega a su fin
La LMD, en vigor desde 2022, permitió a hijos y nietos de españoles exiliados o emigrados recuperar su conexión con España, sin necesidad de renunciar a su nacionalidad de origen. Aunque inicialmente se estableció un plazo de dos años, la alta demanda llevó al Gobierno español a conceder una prórroga de un año. Sin embargo, las autoridades consulares, como las de Rosario en Argentina, han sido claras: no se espera una segunda extensión.
Los comunicados oficiales de los consulados, como el de Rosario, han servido de recordatorio para los solicitantes que aún no han completado el trámite. «El plazo para presentar expedientes de nacionalidad española por la LMD… finaliza el 22 de octubre de 2025», ha sido el mensaje recurrente en sus plataformas.
Medidas especiales para gestionar la alta demanda
Para mitigar el colapso y garantizar que quienes han iniciado el proceso puedan finalizarlo, los consulados están implementando medidas excepcionales. En lugares como Buenos Aires y Rosario, se han habilitado jornadas extraordinarias de atención y se ha agilizado la gestión de citas para aquellos que ya tenían credenciales de trámite.
El objetivo de estas acciones es claro: procesar el mayor número de expedientes posible antes de la fecha límite. A pesar de la urgencia, las autoridades recalcan que la entrega de la documentación no garantiza una respuesta inmediata. Todos los expedientes presentados en tiempo y forma serán válidos y serán tramitados, aunque la resolución final pueda demorarse.
¿Quiénes pueden optar a la nacionalidad?
La Ley de Memoria Democrática contempla varios supuestos para la adquisición de la nacionalidad española:
- Hijos y nietos de españoles de origen que perdieron la nacionalidad por el exilio.
- Hijos de mujeres españolas que perdieron la nacionalidad al casarse con un extranjero antes de la Constitución de 1978.
- Hijos mayores de edad de aquellos que ya obtuvieron la nacionalidad por la Ley de Memoria Histórica de 2007.
Con la cuenta atrás en marcha, el mensaje para los miles de descendientes de españoles es claro: es el momento de actuar si se quiere optar a la nacionalidad.
